Desgastada inocencia
en el camino dejé
por amor a un
hombre
Soñando aquel sueño
mi vida embargué,
y no sé en qué
momento
dejé de ver, que en
sus ojos
mi sueño soñaba sin
su querer.
Aquel cobarde
destino
me eligió para él
y entre tinieblas y
olvido
quedó nuestro ayer.
M M (3-9- 2012)
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